habilidades blandas más demandadas, three people sitting in front of table laughing together

Las 10 habilidades blandas más demandadas por las empresas

Las habilidades blandas son aquellas capacidades que tienen que ver con el comportamiento, la actitud, la personalidad y la inteligencia emocional de las personas. Son esenciales para el éxito profesional y personal, ya que permiten relacionarse mejor con los demás, resolver problemas, adaptarse al cambio, liderar equipos y gestionar el estrés. ¿Sabes cuáles son las habilidades blandas más demandadas?

Las empresas cada vez valoran más las habilidades blandas de sus empleados y candidatos, ya que son difíciles de enseñar y de encontrar. Según un estudio de LinkedIn, estas son las 10 habilidades blandas más demandadas por las empresas en el 2023:

  1. Creatividad: la capacidad de generar ideas originales y novedosas que aporten valor. Para desarrollar la creatividad, se puede practicar el pensamiento divergente, buscar inspiración en otras fuentes, hacer brainstorming, usar técnicas como el mapa mental o el SCAMPER, y experimentar con diferentes formatos y medios.
  2. Persuasión: la habilidad de convencer a los demás de que adopten una determinada postura, acción o decisión. Para mejorar la persuasión, se puede aprender a estructurar un argumento, usar datos y evidencias, apelar a las emociones, mostrar empatía, escuchar activamente y usar técnicas de influencia como el principio de reciprocidad o el de escasez.
  3. Colaboración: la competencia de trabajar en equipo de forma efectiva, coordinada y armoniosa. Para fomentar la colaboración, se puede establecer objetivos comunes, definir roles y responsabilidades, comunicarse de forma clara y frecuente, dar y recibir feedback, reconocer el trabajo de los demás y celebrar los logros conjuntos.
  4. Adaptabilidad: la facultad de ajustarse a las nuevas situaciones, condiciones y desafíos. Para aumentar la adaptabilidad, se puede adoptar una mentalidad de crecimiento, estar abierto al aprendizaje, buscar oportunidades de cambio, ser flexible y resiliente, y buscar el apoyo de los demás.
  5. Inteligencia emocional: la aptitud de reconocer, comprender y gestionar las propias emociones y las de los demás. Para potenciar la inteligencia emocional, se puede practicar la autoconciencia, la autorregulación, la motivación, la empatía y las habilidades sociales.
  6. Liderazgo: la destreza de dirigir, motivar e inspirar a un grupo de personas para alcanzar una meta. Para ejercer un buen liderazgo, se puede tener una visión clara, comunicarla de forma efectiva, delegar tareas, empoderar a los colaboradores, dar ejemplo, resolver conflictos y reconocer el mérito de los demás.
  7. Comunicación: la capacidad de transmitir y recibir información de forma clara, precisa y comprensible. Para optimizar la comunicación, se puede estructurar el mensaje, usar un lenguaje adecuado, adaptarse al contexto y al público, usar recursos visuales, verbales y no verbales, escuchar activamente y solicitar feedback.
  8. Gestión del tiempo: la habilidad de organizar y planificar el tiempo de forma eficiente y productiva. Para mejorar la gestión del tiempo, se puede establecer prioridades, fijar plazos, usar herramientas como agendas, calendarios o listas de tareas, eliminar distracciones, delegar actividades, hacer pausas y evaluar los resultados.
  9. Resolución de problemas: la competencia de identificar, analizar y solucionar problemas de forma creativa y efectiva. Para potenciar la resolución de problemas, se puede usar el método de las 5W (qué, quién, cuándo, dónde y por qué), aplicar técnicas como el diagrama de Ishikawa o el análisis DAFO, generar alternativas, evaluar pros y contras, y tomar decisiones.
  10. Pensamiento crítico: la capacidad de razonar, evaluar y juzgar de forma lógica, objetiva y fundamentada. Para desarrollar el pensamiento crítico, se puede cuestionar las suposiciones, contrastar fuentes e información, evitar sesgos y falacias, argumentar con datos y evidencias, y estar abierto a otras perspectivas y opiniones.

Estas son algunas de las habilidades blandas más valoradas por las empresas en el 2023, pero no son las únicas. Otras habilidades blandas importantes son la iniciativa, la curiosidad, la ética, la confianza, el humor, la asertividad, la negociación, la innovación, el aprendizaje continuo, la gestión del estrés, la atención al detalle, la orientación al cliente, la diversidad e inclusión, y la gestión de proyectos.

women using laptop
Fuente: Pexels

Por las habilidades duras te contratan, por deficiencias en las blandas te despiden

Las habilidades duras son aquellas que se pueden medir, certificar y demostrar, como los estudios de pregrado, postgrado, maestrías, doctorados, el dominio de un idioma, un software, una técnica o un conocimiento específico. Son las que suelen figurar en el currículum y las que más se tienen en cuenta a la hora de contratar a un candidato.

Sin embargo, las habilidades duras no son suficientes para garantizar el éxito profesional ni la permanencia en un puesto de trabajo. También se requieren las habilidades blandas, que son aquellas que tienen que ver con el comportamiento, la actitud, la personalidad y la inteligencia emocional de las personas. Son las que permiten relacionarse mejor con los demás, resolver problemas, adaptarse al cambio, liderar equipos y gestionar el estrés.

Las habilidades blandas más demandadas son más difíciles de enseñar y de encontrar, y por eso son más valoradas por las empresas. Según el estudio de LinkedIn, el 92% de los reclutadores considera que las habilidades blandas son tan importantes o más que las duras, y el 89% dice que la falta de habilidades blandas es la principal razón por la que despiden a los empleados.

Estas habilidades pueden marcar la diferencia entre un empleado mediocre y uno excelente, entre un seguidor y un líder, entre un problema y una solución. Por eso, es importante desarrollar las habilidades blandas, tanto para conseguir un empleo como para mantenerlo y progresar en él.

En conclusión, las habilidades duras son necesarias para entrar en el mercado laboral, pero las blandas son las que determinan el desempeño, el crecimiento y la permanencia en él. Desarrollar estas habilidades blandas puede suponer una ventaja competitiva en el mercado laboral, así como un beneficio personal y profesional. Para ello, se puede recurrir a cursos, libros, podcasts, blogs, vídeos, webinars, mentorías, coaching, feedback, autoevaluación, práctica y experiencia.

Publicaciones Similares